Tras algunos enfrentamientos emocionantes en la primera ronda de partidos eliminatorios, los octavos de final de la Eurocopa 2024 ya han pasado. De cara a los cuartos de final, los equipos se enfrentan a un reto complicado, ya que no sólo tienen que prepararse tácticamente contra rivales cada vez más fuertes, sino también demostrar una vez más su garra y su espíritu de lucha.

En el fútbol, los cuartos de final son como minidramas dentro de un gran torneo, donde surgen héroes, se rompen corazones y se forjan leyendas. En la historia del torneo, ha habido muchos enfrentamientos que han dejado a los aficionados al borde de sus asientos.
He aquí un repaso a algunos de los cuartos de final más épicos que hemos visto en la Eurocopa...

 

EUROCOPA 2016: El triunfo de cuento de hadas de Gales

Bélgica, con una selección repleta de talento, era considerada una de las favoritas en 2016. Tras un comienzo difícil contra Italia, encontró la forma y superó su grupo antes de derrotar a Hungría por 4-0 en octavos de final. Gales, inspirada por Gareth Bale, se proclamó campeona de su grupo y derrotó a Irlanda del Norte, lo que le permitió enfrentarse a los Diablos Rojos en cuartos de final.

El tempranero gol de Radja Nainggolan para Bélgica sentó las bases de su progresión, pero el lema de Gales "Juntos, más fuertes" demostró ser algo más que un simple eslogan. El capitán Ashley Williams empató con un potente cabezazo, antes de que un sublime giro y remate de Hal Robson-Kanu diera la ventaja a Gales. Sam Vokes sentenció el encuentro con un cabezazo en los últimos minutos, asegurando la victoria de su equipo por 3-1 e impulsando a Gales a las semifinales, consolidando su estatus de Cenicienta de la Eurocopa 2016.

 

EUROCOPA 2004: La angustia de Inglaterra

En un emocionante partido de cuartos de final contra la anfitriona Portugal, Inglaterra se adelantó en el marcador gracias a un brillante gol de Michael Owen. El partido fue una montaña rusa, con el empate tardío de Hélder Postiga y el gol anulado a Sol Campbell. En la prórroga, Rui Costa adelantó a Portugal, pero Frank Lampard igualó la contienda y envió el partido a los penaltis.

La tanda fue muy tensa y, en un giro inesperado, el guardameta portugués Ricardo marcó el penalti decisivo, eliminando a Inglaterra. Este encuentro fue el preludio de otra dolorosa eliminación por penaltis de Inglaterra contra Portugal en los cuartos de final del Mundial de 2006.

 

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EUROCOPA 1996: El momento mágico de Poborsky

El exquisito lanzamiento de Karel Poborský marcó la diferencia para que la República Checa superara a Portugal y alcanzara las semifinales en la edición de 1996. A pesar de la destreza de Portugal en el centro del campo, tuvo problemas contra la firme defensa checa. El partido se decidió gracias a la genialidad de Poborský en el minuto 53, cuando elevó el balón por encima del portero Vítor Baía, que se adelantaba.

Los checos tuvieron que aguantar tras la tardía expulsión de Radoslav Látal. El guardameta Petr Kouba realizó paradas cruciales en los primeros compases, frustrando a Fernando Couto y Sá Pinto. La posesión portuguesa apenas dio frutos, y su mejor ocasión fue un cabezazo de Jorge Cadete que se marchó fuera tras la expulsión de Látal. Los disciplinados checos pasaron a semifinales gracias a la genialidad de Poborský.

 

EUROCOPA 2008: La resistencia turca

Croacia dominó su partido de cuartos de final contra Turquía, con Ivica Olić estrellando un balón en el larguero e Ivan Klasnić marcando en el último minuto de la prórroga. Sin embargo, la actitud de Turquía de no rendirse nunca brilló cuando Semih Şentürk empató en el tiempo añadido, forzando la tanda de penaltis. Turquía se impuso por 3-1 en la tanda, en la que el veterano guardameta Rüştü Reçber detuvo penas máximas decisivas.

Aunque Turquía se adelantó contra Alemania en semifinales, fue víctima de un gol en el último minuto, lo que puso fin a su extraordinaria trayectoria. No obstante, estos cuartos de final demostraron el espíritu indomable de Turquía.

 

EUROCOPA 2016: Victoria maratoniana de Alemania

El 3 de julio de 2016, Alemania se enfrentó a Italia en un partido de cuartos de final que se alargó hasta el final y acabó en una dramática tanda de penaltis. Mesut Özil adelantó a Alemania antes de que Italia empatara con un penalti transformado por Leonardo Bonucci. La tanda fue angustiosa, ya que ambos equipos fallaron varios penaltis.

Jonas Hector marcó finalmente el penalti decisivo tras el fallo de Matteo Darmian, asegurando la primera victoria competitiva de Alemania sobre Italia. Este duro encuentro puso de manifiesto la resistencia de ambos equipos, y Alemania avanzó para enfrentarse a Francia en semifinales.

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